La Revisión Técnica Vehicular (RTV) es un proceso de mantenimiento legal y preventivo en el cual todos los vehículos, tanto públicos como privados, deben someterse a una inspección anual por una entidad certificadora que verifica el cumplimiento de las normas de seguridad y emisiones contaminantes.
El objetivo fundamental de la RTV es prevenir accidentes de tránsito causados por vehículos en mal estado y reducir las emisiones de carbono a la atmósfera. Es importante destacar que la inspección no aplica a los vehículos nuevos.
Garantiza el éxito de tu revisión vehicular evaluando los siguientes aspectos:
Estado de las luces:
Se verifica el correcto funcionamiento, intensidad y color de las luces, así como la condición de las micas de los faros para asegurar una visibilidad óptima.
Estado de las llantas:
Se realiza una inspección visual de la banda de rodadura, la cual no debe estar desgastada por debajo de los niveles mínimos establecidos, dependiendo si el vehículo es liviano o pesado. También se verifica la presión correcta de los neumáticos según las especificaciones del fabricante.
Medición de gases:
Para superar esta prueba, el motor debe contar con inyectores limpios, bujías y cables en buen estado, además de filtros de aire y combustible en condiciones adecuadas. Estos componentes generalmente son revisados durante los mantenimientos del vehículo.
Revisión de frenos:
Se inspeccionan los diferentes componentes del sistema de frenado, como pastillas, zapatas y el nivel de líquido de freno, asegurando que estén en óptimas condiciones.
Suspensión:
Se comprueba el correcto funcionamiento de los amortiguadores sin fugas de aceite. También se inspeccionan los cauchos de platos y ballestas en caso de vehículos pesados, así como la suspensión y el desgaste de las barras estabilizadoras.
Dirección:
Se verifica que las terminales y acoples de dirección estén libres de desgaste. Además, se confirma que la alineación de las llantas esté en conformidad con las especificaciones del fabricante.
Fugas de fluidos:
Se lleva a cabo una revisión exhaustiva en busca de posibles fugas de fluidos, como aceite de motor, caja de cambios, dirección hidráulica, refrigerantes, líquido de freno y embrague.
Carrocería:
Se realiza una inspección visual para detectar rayones, hundimientos profundos, abolladuras y daños en ventanas o parabrisas.
Dispositivos de seguridad:
El vehículo debe estar equipado con cinturones de seguridad en buen estado, botiquín de primeros auxilios, triángulos de seguridad, conos y extintor de incendios.
Es importante tener presente que, para lograr la aprobación en la revisión vehicular, es fundamental llevar a cabo mantenimientos preventivos y correctivos de manera regular en un taller de confianza o concesionario autorizado. Es esencial resaltar la revisión de los siguientes aspectos:
- Alineación, balanceo y rotación de llantas.
- Cambios de aceite siguiendo las recomendaciones del fabricante.
- Revisión, reajuste y/o cambio de frenos.
- Cambio de filtros de aire y combustible.
- Reajuste de la suspensión.
- Verificación de las luces.
- Control de los niveles de los líquidos del vehículo.
- Inspección de los puntos de funcionamiento de los cinturones de seguridad.
En Grupo Mavesa contamos con talleres a nivel nacional y personal altamente capacitado que asegura que tu vehículo se mantenga en excelentes condiciones mecánicas y de carrocería para cumplir con éxito la RTV. Recuerda, esto contribuye a la seguridad tanto de los ocupantes del vehículo como a la seguridad vial en general.
Mantener nuestro vehículo en óptimas condiciones puede marcar la diferencia en el bienestar de nosotros y nuestra familia.
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